Es un polímero producto de más de cinco años de investigaciones científicas, se utilizaron más de 100 polímeros diferentes con objeto de replicar la piel sana. El material a base de silicona con la cual se construye un polímero de olivo se ajusta a los mejores criterios de la piel nueva: Elasticidad, transpirabilidad, la invisibilidad y resistencia al agua.
Entre sus usos posibles pueden ser eczemas, dermatitis y proporciona protección solar a largo plazo de UV mediante la incorporación SPF.
La segunda piel es una adherencia a la piel de larga duración y genera una barrera de protección a las agresiones mecánicas y químicas externa, mantiene la piel seca e incluso con el contacto del agua. La capacidad de equilibrar de manera óptima el oxígeno y permeabilidad de la humedad proporciona condiciones ideales para la curación de la piel. La capa de polímero invisible se deriva de un material a base de polisiloxano sintonizable que puede tener adicionalmente otras propiedades con otros insumos.